Blogia
LiteralMente

Sin piedras en las manos

SIN PIEDRAS EN LAS MANOS

Apenas me doy cuenta
de lo alto de estas murallas
erigidas en el tiempo
y sin embargo
fueron mis brazos los que apilaron
piedra gris sobre piedra gris
y mis ojos los que se detuvieron
en el musgo ahogado por el polvo.
¿Cuándo fue la última vez
que pude atravesarlas sino
al amparo de un verso?
Si tan sólo pudiera mirarte
sin piedras en las manos.

0 comentarios